La función de un producto a menudo se relaciona con su forma y esto supone una gran verdad dentro del mundo de la fabricación. La rigurosidad de los procedimientos de control de calidad asegura que los componentes se fabriquen de acuerdo con sus especificaciones precisas, antes de ser ensamblados en un conjunto funcional completo.

Estos controles pueden incluir muchas tareas como las especificaciones geométricas de los productos (GPS), el análisis de fractura o las pruebas de rugosidad de la superficie, y constituyen el núcleo del control de calidad en muchos procesos de fabricación. Como tales, pueden realizarse procedimientos idénticos en sectores industriales tan diversos como la ingeniería médica, la electrónica y la industria automovilística.

Dentro de las técnicas comúnmente utilizadas para realizar tareas en el control de calidad se incluyen la perfilometría de contacto y la microscopía de luz tradicional. Éstas exigen un alto nivel de precisión tanto en inspección como en metrología.

Aunque estos métodos son en gran medida la piedra angular del control de calidad industrial, el nuevo enfoque que presentan los microscopios digitales se está convirtiendo en una solución cada vez más popular, introduciendo el control de calidad industrial a la era digital.

 

Métodos convencionales de control de calidad

Varios métodos, vistos como estándar, son ampliamente utilizados en la industria para realizar tareas de control de calidad. Para las tareas de metrología dimensional, el GPS correcto puede ser hallado con herramientas de medición como calibres. En su lugar, también pueden ser medidos con la máquina de medición de coordenadas (CMM), que se basa en una sonda mecánica u óptica para medir en tres dimensiones y mostrar esta información de forma matemática.

Los microscopios de luz tradicional suponen una herramienta tan versátil, que se utiliza para el análisis veloz en muchos procedimientos. Este ha sido un pilar desde principios del siglo XX, lo que permitió la primera ola de ingeniería de precisión siendo una tecnología realmente avanzada fruto de la revolución industrial. Su éxito se refleja en su persistencia como una técnica fundamental en la industria y las nuevas tecnologías de microscopía digital se basan en este éxito.

 

Microscopios digitales: Una solución accesible para la medición e inspección industrial avanzada

Las tecnologías digitales se están convirtiendo en la norma en muchas áreas de nuestras vidas. Siguiendo esta tendencia, esta nueva categoría de microscopio saca lo mejor de las tecnologías ópticas y digitales, para la gestión eficiente de los flujos de trabajo industriales de control de calidad.

Los microscopios digitales se basan en técnicas de microscopio modernas, controladas y visualizadas a través de un monitor para lograr una simplicidad intuitiva para cualquier operador, independientemente de su experiencia.

La inspección y medición exactas ya no dependen del conocimiento profundo de la microscopía, debido a varias características innovadoras tanto en el sistema como en el diseño del software del microscopio digital.

Un análisis más rápido permite una toma de decisiones mucho más veloz en comparación con las técnicas tradicionales y los sistemas digitales proporcionan, además, una plataforma completa de investigación, medición y presentación de informes.

Con la captura y visualización digital, las lentes se han convertido en una cosa del pasado. Trabajar en el microscopio durante largos períodos de tiempo siempre ha sido incómodo, sin embargo, con el microscopio digital se nos muestra la imagen en un monitor, lo que resulta en una labor de trabajo mucho más cómoda y efectiva. La visualización en pantalla también es mucho más adecuada para múltiples usuarios, para usarse en análisis conjuntos o con fines educativos.

Los informes también se gestionan de forma más eficiente en la plataforma digital. La documentación extraída del microscopio incluye los ajustes de observación junto con los resultados, por lo que dicha información puede ser rápidamente devuelta a I+D o a producción, o compartida para servir en el adiestramiento.

 

Conclusiones

En los últimos años, las técnicas de microscopio han avanzado rápidamente tanto en rendimiento como en complejidad. La tecnología de microscopía digital se beneficia de estos avances y los hace accesibles para operadores en cualquier nivel de experiencia, permitiéndoles concentrarse completamente en la tarea de inspección.

Como tales, las tecnologías digitales son ideales para la gestión de flujos de trabajo completos de control de calidad industrial, agilizando las tareas de generación de imágenes, medición e informes de muchos procedimientos de control de calidad mediante un funcionamiento rápido e intuitivo.

Un análisis más rápido permite también una toma de decisiones más rápida. Además, los microscopios digitales  presentan un método más eficiente de control de calidad, en comparación con las técnicas tradicionales. En situaciones más complejas, los microscopios digitales también suponen un punto de partida rápido y rentable, indicando si son necesarios otros análisis más especializados como AFM o SEM, lo que garantiza que esta inversión de tiempo y recursos esté plenamente justificada.