Los equipos y maquinaría que se emplean en las diferentes industrias necesitan ser comprobadas regularmente para comprobar que están realizando su función correctamente. Como parte fundamental de los procesos productivos, la metrología 4.0 es la ciencia que se encarga de realizar estas medidas y comprobaciones. Con la aparición de la cuarta revolución industrial se está tendiendo hacia lo que ya se conoce como la metrología inteligente y conectada.

Las exigencias de la industria 4.0

Los avances de las nuevas tecnologías, así como la evolución del mundo digital han provocado que sectores como el aeronáutico, el naval o sectores energéticos como el eólico se vean en la necesidad de trasladar la metrología desde el laboratorio hasta la planta de fabricación. Así es como aparece en escena la metrología 4.0.

En los sectores industriales que trabajan con productos cada vez más sofisticados de gran volumen y peso, urge la necesidad de disponer de mediciones inteligentes y precisas. En este sentido, la metrología 4.0 cuenta con sensores que optimizan la producción en el mismo punto de fabricación.

Las exigencias de la industria 4.0 son altas, pero las empresas que consigan adaptarse a ellas lograrán reducir costes. También mejorarán la calidad de sus productos, reduciendo el tiempo de fabricación de los mismos.

Funciones preventivas y predictivas

Uno de los objetivos fundamentales de esta nueva industria es poder prevenir con tiempo suficiente los imprevistos surgidos del uso de la maquinaria. Tanto es así, que la metrología 4.0 ha de ser capaz de medir y actuar en tiempo real. De esta manera, las mediciones y comprobaciones serán, incluso, más rápidas que el proceso de fabricación. Se trata de controlar al 100% todo lo que sucede en planta.

Para llegar a este nivel de exigencia la metrología industrial ha empezado a desarrollar herramientas de software capaces de almacenar y gestionar una inmensa cantidad de datos. Esto significa que, cuanta mayor información se obtenga por parte de la metrología 4.0, mayor será la capacidad de la industria de poder reaccionar ante posibles incidencias inesperadas.

Cómo funciona la metrología 4.0

Una máquina genera unos informes. Estos datos se almacenan en la nube de la empresa para estar siempre disponibles. La información obtenida se desglosa y analiza para poder generar unos resultados predictivos que sirvan de ayuda en el futuro. Finalmente, se desarrollan unas serie de estrategias preventivas y predictivas basadas en todos los datos obtenidos.

En definitiva, toda esta revolución tecnológica que estamos viviendo requiere de mejores equipos de medición y calibración. La competitividad entre las diferencias industrias y la digitalización de los procesos exige que el proceso de producción sea cada vez más preciso, pero al mismo tiempo más rápido. Los errores se pagan con tiempo y dinero. Por este motivo, mejorar la metrología de los sistemas es una gran reto para las industrias menos maduras del mercado, ya que necesitarán trasladar la trazabilidad de las medidas desde el laboratorio hacia el entorno productivo.

Y es que el binomio medición-fabricación es todo un elemento habilitador para poder asegurar el futuro de la producción industrial en nuestro país.