El Observatorio de la Industria 4.0 ha dado a conocer las principales conclusiones del estudio Smart Industry, el cual pretende evaluar el estado de las empresas en España en lo que respecta a la implantación de la industria 4.0, así como establecer nuevos hitos en el camino hacia la transformación digital.

Entre las principales conclusiones del estudio destacan:

  • La resistencia al cambio continúa siendo el mayor freno dentro de las empresas para la transformación digital, pero año tras año aumenta la formación que las compañías imparten a sus empleados en Industria 4.0. La intención de inversión de las empresas en planes de formación de Industria 4.0 está creciendo y ha pasado del 78% entre 1 y 3 años del 2019 al 82% en el 2020.
  • La recopilación de datos a lo largo del proceso y su tratamiento se mantienen como los principales paradigmas para conseguir reducir costes.
  • El conocimiento, la gestión y explotación del dato siguen siendo los conocimientos más demandados por las empresas.
  • El informe reafirma el crecimiento exponencial de la digitalización en el sector industrial, con un incremento en los planes de transformación digital y una mayor concienciación de la necesidad de llevarla a cabo, incentivada por la situación extraordinaria que vivimos. Al consolidarse en el sector la idea de la digitalización en el proceso productivo, las empresas se ven en la necesidad de apostar e invertir en tecnologías 4.0, respaldadas por la seguridad de que su facturación anual, está alineada con su interés en dicha innovación.
  • También, se observa una mejora en la matriz de competencias que los empleados necesitan en Industria 4.0, así como la transmisión de información entre la plantilla. Debido a esto, y extrapolándolo a nivel particular, supone un crecimiento en el conocimiento que tiene cada empleado en este nuevo entorno industrial.
  • El 92% de los encuestados prevé invertir en mejoras en la producción de nuevos productos en un horizonte a corto y medio plazo.
  • El 69% de los encuestados tiene previsto invertir a lo largo de 1-3 años en la planificación de la demanda y de la cadena de suministro. La monitorización centralizada y la trazabilidad a lo largo de la cadena, si bien se extienden algo más en el horizonte temporal, son también los ámbitos en los que las empresas van a invertir más.
  • Además de la resistencia al cambio, otros inconvenientes para la transformación digital son las altas inversiones requeridas y los efectos de la actual crisis económica.

El estudio se ha realizado en colaboración con everis, Advanced Factories y el Club Excelencia en Gestión